Alta Ruta Chamonix - Zermatt en esquí
Alta Ruta por Verbier

No hay duda en que esta travesía es la clásica de las clásicas, si no lo tienes claro, el primer día al coger el teleférico de grands Montets, la realidad te aplasta.... largas colas para poder subir a la cima de Montets, inicio de esta fantástica aventura.
Descendiendo al glaciar de Argentiere, se observa el collado de Chardonnet, entre la aguja de Argentiere y Chardonnet.
El grupo remontando las rampas hacia Chardonnet, con las impresionantes caras norte de Les Droites y la Verte.
El Rapel o destrepe de 60m del collado da acceso al glaciar de Orny, ya estamos en Suiza.
Remontando el glaciar de Orny dirección a la fenetre de Salienaz
La cabanne de Trient después de un gran día.
Las Aiguilles Dorées, al atardecer...ahora se de donde viene su nombre
En la Brecha des Ecandis, paso clave, con mal tiempo tiene su gracia...
El largo descenso a Campex 1600mts de buena bajada!
El refugio de Montfort en media de las pistas de Verbier, queda claro que estás en Suiza...
Tercer día de travesía, destino al Roseblanche. En esta ocasión por el mal tiempo ( falta de visibilidad) decidí ir por los collados inferiores Sur. Tres collados consecutivos que te situan detrás del Roseblanche, y dan paso a las diagonales de Dix, muy recomendable a menos que se quiera subir a la cima de la misma. ¡Ojo a las avalanchas, es sur!
Sara y Xevi disfrutaron de lo lindo, aún no encontrando la mejor nieve... y es que en una travesía así, mejor que os sobre nivel que no que falte, vuestras piernas lo agradecerán.
Miguel y Álvaro en la subida a Dix bajo un calor infernal. Suerte que con buen humor todo se lleva mucho mejor.
En Dix, las caras después de un día de "guerra" son patentes, os aseguro que nos pusimos muuucha crema solar.
Un día clave, el cuarto, el paso de la Serpentine nos espera.... al fondo el Mt. Blanc de Cheillon
La Serpentine en perfectas condiciones de nieve, progresamos en esquís, los crampones se quedan en la mochila. Desde su cumbre ya veremos el Cervino!
La Peigne d'Arolla, paso obligado de la ruta y mirador inigualable de tda la travesía. Debajo, el refugio de Vignettes donde nosotros no dormiremos.
El plató que da acceso al coll de l'Eveque (al fondo) Ambiente asegurado.
El Refugio Nacamuli al final de la cuarta jornada. Este pequeño refugio situado en la vertiente Italiana del Coll Collon, es una buena alternativa para esta jornada, os lo recomiendo, menos gente y guardas majos, a estas alturas de la travesía es un lujo.
Bueno si, y cervezas de 560ml... lo cual también juega mucho a su favor.
La subida al coll Broulé, penúltimo collado antes del tan ansiado descenso a Zermatt.
En el collado de Valpelline, en la silueta del Cervino se recorta la arista italiana del Leone (derecha), un momento muy especial para todos los componentes y especialmente para mi como guía.
Ahora quedan por delante 2000m de desnivel y más de 20kms de descenso a la sombra de la cara norte del Matterhorn.
Para finalizar deciros que es una travesía muy recomendable si se tiene un mínimo nivel físico y técnico. Cualquier esquiador de montaña debería hacerla al menos una vez el la vida y así comprendería las palabras del pionero John Forbes cuando dijo de ella;
"Mi corazón continúa allí donde mi cuerpo no podrá volver más"